Ésta receta es ideal para impresionar a los invitados con un entrante delicado y vistoso, refrescante y lleno de sabor. Yo los hice como uno de los varios entrantes en una fiesta barbacoa que dimos. Los otros eran una ensaladilla de las de toda la vida (a petición de todos los asistentes, aún siendo chilenos) y un gazpacho de sandía. La idea surgió porque tenía muchísimo pan del día anterior y salmón ahumado que no era suficiente como para hacer un carpaccio de ahumados (además tampoco tenia atún ni bacalao ahumado ni mucha opción a conseguirlos facilmente), así que es una receta que me hace sentirme doblemente orgullosa, puesto que...